¿Por qué nos da cáncer y cómo evitarlo?

Escrito por Gabriela Hinojosa-Ventura y Orfil González-Reynoso

Imagen de Engin Akyurt en Pixabay

Hay cientos de investigaciones relacionadas con el tema del cáncer que han ayudado a aumentar la expectativa y/o calidad de vida de las personas que padecen esta enfermedad; sin embargo, aún existe desconocimiento y desafíos en este sentido, a la vez que las cifras de incidencia y de mortalidad siguen incrementando.

Existen más de 100 tipos de cáncer, categorizados de acuerdo con el lugar donde comienzan a desarrollarse las primeras células tumorales, y son múltiples los factores que favorecen el riesgo a desarrollar esta enfermedad. Por lo anterior, resulta bastante complejo homogeneizar los factores y/o riesgos, puesto que cada tipo de cáncer se desarrolla bajo características específicas. Desde una perspectiva práctica, es conveniente reflexionar sobre las siguientes cuestiones: ¿Por qué nos da cáncer?, y ¿Qué puedo hacer para prevenir o evitar esta enfermedad?

En este documento se abordan estos cuestionamientos, se describen los factores de riesgo que lo provocan y se llega al razonamiento de que en su mayoría los riesgos a desarrollar cáncer son cuestiones que tienen que ver con un estilo de vida poco saludable, como el consumo de ciertos alimentos, la falta de actividad física, el consumo de alcohol y el tabaco, además de factores como las infecciones, exposición a radiaciones y compuestos carcinogénicos.

 

Cifras y estadísticas de cáncer en el mundo y en México

La mayoría de las personas conocemos o hemos conocido a alguien que padece o padeció cáncer, esto es debido a las altas tasas de incidencia y de mortalidad. En el mundo existen cerca de 70 millones de personas que padecen cáncer, incluyendo a enfermos reportados como nuevos casos por año (aprox. 20 millones) y aquellos de prevalencia durante los últimos cinco años (aprox. 50 millones). Del total de enfermos reportados en 2020, murieron cerca de 10 millones.

En México, en 2020, se reportaron 503 602 y 195 499 casos de enfermos de cáncer, que corresponden a enfermos con prevalencia de cinco años y los reportados como casos nuevos, respectivamente; del total de enfermos fallecieron 90 222. En 2019, el INEGI consideró que las muertes por tumores malignos corresponden a un 12 % de las defunciones totales.

 

Descripción del cáncer

El cáncer es la pérdida de los mecanismos de control en el ciclo celular debido a una mutación a nivel de DNA, lo que conlleva a un crecimiento celular descontrolado hasta la formación de un tumor primario y, si no se hace una detección y tratamiento oportuno, estas células tumorales se siguen reproduciendo sin control hasta la formación de tumores secundarios, proceso conocido como metástasis.

¿Por qué nos da cáncer?

El cáncer es provocado por una mutación que lleva a un daño en el ciclo celular, siendo múltiples los factores que lo causa, por ejemplo, los genéticos; sin embargo, la mayoría se deben a cuestiones medioambientales que tienen que ver con el estilo de vida y con la dieta que llevamos, si bien es cierto que los factores económicos, sociales, culturales, etc., determinan nuestros hábitos alimentarios, de actividad física y sociales, también lo es que en el conocimiento está la clave para poder mejorar y/o cambiar el estilo de vida que hasta el momento, por las circunstancias mencionadas, hemos llevado.

En este sentido, a continuación, se describen algunos factores que han mostrado evidencia científica con el desarrollo de distintos tipos de cánceres.

 Desarrollo del cáncer.

Consumo de bebidas alcohólicas

Desde 1987, se clasificó a las bebidas alcohólicas como cancerígenas para los humanos. Este factor se asocia con diferentes tipos de cánceres, tales como: estómago, mama, colorrectal, hígado y tracto aerodigestivo superior (cavidad oral, faringe, laringe y carcinoma de células escamosas del esófago). En 2014 se hizo una estimación de la incidencia del consumo de alcohol en diferentes tipos de cánceres y se encontró que este factor causa 5.6 % del total de los casos de cáncer y un 4 % del total de las muertes en Estados Unidos. Específicamente, la relación de la incidencia de los diferentes tipos de cánceres es de 40.9 % cavidad oral/faringe, 23.2 % laringe, 21.6 % hígado, 21 % esófago, 12.8 % colorrectal y 16.4 % de mama del total de los casos.

La recomendación, según los lineamientos de la Sociedad Americana de Cáncer (ACS) (2020), es que preferentemente no se consuman bebidas con alcohol, o bien limitar su consumo a no más de una bebida en mujeres y en hombres no más de dos por día.

 

Sobrepeso y obesidad

Del total de incidencia de cáncer en Estados Unidos en 2014, aproximadamente el 10.9 % se atribuyó al sobrepeso u obesidad. Específicamente, hay una relación o influencia en cuanto a que el exceso de grasa corporal puede aumentar el riesgo de los siguientes tipos de cánceres: mama, colorrectal, endometrial, vesícula biliar, riñón, hígado, ovario, páncreas, próstata, tiroides, estómago y adenocarcinoma esofágico. El exceso de grasa corporal (sobrepeso y obesidad) se debe a la demasía de energía aportada por la ingesta de alimentos y bajo gasto energético.

La primera recomendación es mantener un peso adecuado durante toda la vida (el peso no debe ser proporcional con la edad), consumir una dieta balanceada que incluya una variedad de verduras, legumbres (ricos en fibra), cereales integrales, frutas (con moderación). En contraparte, también hay evidencia científica de la relación del efecto de la pérdida de peso asociada a la disminución del riesgo a padecer cáncer de mama y endometrial.

 

El tabaquismo

Es uno de los factores de riesgo para desarrollar diferentes tipos de cánceres y es el más difundido en los medios. Sin embargo, y a pesar de esto, sigue siendo el factor con mayor porcentaje asociado a las tasas de incidencia de cáncer.

 

La falta de actividad física

Hay evidencia científica de la influencia de la disminución de riesgo a padecer distintos tipos de cánceres con la realización de actividad física, estos son: mama, colorrectal, endometrial, vesícula biliar, riñón, hígado, ovario, páncreas, estómago y adenocarcinoma esofágico.

 

La alimentación-dieta

El plan alimentario que se lleve, puede actuar en nuestro organismo de doble manera: favoreciendo o disminuyendo el riesgo a padecer distintos tipos de cánceres. Los patrones dietéticos que aumentan el riesgo a padecer cáncer son:

 

Consumo de carnes rojas y procesadas: incrementa el riesgo de padecer cáncer colorrectal, pulmón y páncreas.

Bajos niveles de la vitamina D: puede incrementar el riesgo a desarrollar cáncer colorrectal.

Suplementos con altos contenidos de β-caroteno: se asocia con el riesgo de cáncer de pulmón.

Grasas saturadas y bebidas azucaradas: se relacionan con el aumento de riesgo a desarrollar cáncer de páncreas.

Alto consumo de lácteos y calcio (>2000 mg/día): incrementa el riesgo a padecer cáncer de próstata.

 

Por otro lado, se ha comprobado la relación de un plan alimentario saludable con la disminución de riesgo a padecer algunos tipos de cánceres, tales como:

 

Los patrones dietéticos ricos en vegetales y bajos en productos animales y carbohidratos refinados, la dieta mediterránea, vegetales sin almidón, vegetales ricos en carotenoides y dietas ricas en calcio, se relacionaron con la disminución de cáncer de mama.

El consumo de granos enteros altos en fibra y bajos en azúcar añadida, así como el consumo de vegetales y frutas bajos en almidón y dietas ricas en calcio, se relacionan con la probable disminución de cáncer colorrectal.

El consumo de dietas con bajo índice glucémico (evitando el consumo de azúcares), se relaciona con la posible disminución del riesgo de cáncer endometrial.

El consumo de pescado se relaciona con la disminución de riesgo de cáncer de hígado.

La alimentación con la ingesta de vegetales sin almidón, frutas enteras con alto contenido de vitamina C, se relaciona con la disminución de riesgo de cáncer de pulmón, de estómago y del sistema aerodigestivo superior.

Otros factores

Otros factores son los carcinógenos físicos que incluyen las radiaciones ionizantes y ultravioleta, los carcinógenos químicos (tales como amianto, humo del tabaco, aflatoxinas, arsénico, etc.) y los carcinógenos biológicos (que incluyen a ciertos virus, bacterias y parásitos).

 

¿Qué podemos hacer para evitar esta enfermedad?

Las estadísticas de los factores de riesgo relacionadas con el desarrollo de cáncer, nos indican que la probabilidad de tener esta enfermedad tiene que ver con un estilo de vida poco saludable, pero podemos disminuir el riesgo cuidando nuestros hábitos diarios, por ejemplo, evitando el consumo de tabaco y de alcohol (o limitarse a una copa de vino por día en mujeres y dos en hombres), manteniendo un peso adecuado (no sobrepasar el IMC y llevar una dieta sin sobrepasar el requerimiento calórico según nuestra fisionomía y edad), consumiendo alimentos saludables (vegetales bajos en almidón, granos enteros, carne en forma moderada, pescado, evitar las bebidas y alimentos azucarados, exceso de lácteos y vitamina D) y, finalmente, realizando actividad física de manera habitual (adultos de 150 a 300 minutos de actividad física de intensidad moderada por semana, o de 75 a 150 minutos de actividad física de intensidad vigorosa; niños y adolescentes deben participar en al menos una hora de actividad de intensidad moderada o vigorosa cada día).

Aunado a lo anterior, es importante realizarse las pruebas de rutina según las recomendaciones de salud para la posible detección y tratamiento oportuno de la enfermedad.

 

Gabriela Hinojosa-Ventura. Centro Universitario de Ciencias e Ingenierías, Universidad de Guadalajara, Laboratorio de Bioinformática, posdoctorante del Programa de Doctorado en Ciencias en Procesos Biotecnológicos. Guadalajara, Jalisco.

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Orfil González-Reynoso. Centro Universitario de Ciencias e Ingenierías, Universidad de Guadalajara, Laboratorio de Bioinformática, posdoctorante del Programa de Doctorado en Ciencias en Procesos Biotecnológicos. Guadalajara, Jalisco.

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Para Saber Más: 

Ferlay J., Ervik M., Lam F., Colombet M., Mery L., Piñeros M., Znaor A., Soerjomataram I. B. F. (2020). Global Cancer Observatory: Cancer Today. Lyon, France: International Agency for Research on Cancer. https://gco.iarc.fr/today 

INEGI. (2021, 4 de febrero). Estadísticas a Propósito del Día Mundial Contra el Cáncer [Comunicado de prensa núm. 15]. https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/aproposito/2021/cancer2021_Nal.pdf

Rock C. L., Thomson C., Gansler T., Gapstur S. M., McCullough M. L., Patel A. V., Andrews K. S., Bandera E. V., Spees C. K., Robien K., Hartman S., Sullivan K., Grant B. L., Hamilton K. K., Kushi L. H., Caan B. J., Kibbe D., Black J. D., Wiedt T. L., … Doyle C. (2020). American Cancer Society guideline for diet and physical activity for cancer prevention. CA: A Cancer Journal for Clinicians, 70(4), 245-271. https://doi.org/10.3322/caac.21591