En una acelerada búsqueda para encontrar fármacos antivirales con alta efectividad en el control de COVID-19, recientemente se publicó en la revista “Science”, por un grupo de científicos de Estados Unidos, España y Francia, el hallazgo de la PLITIDEPSINA (aplidina), un fármaco sintético con estructura similar al producido por un invertebrado marino, desarrollado inicialmente por sus efectos anticancerígenos (Plitidepsin has potent preclinical efficacy against SARS-CoV-2 by targeting the host protein eEF1A | Science (sciencemag.org). Esta molécula no ataca directamente al virus, sino a una proteína humana que el virus requiere para replicarse, con una efectividad hasta 100 veces más que otros antivirales, que la muestra como el antiviral más potente y prometedor hasta ahora. El reporte hecho por Kris M. White de la Escuela de Medicina Icahn Monte Sinai de Nueva York (Estados Unidos), Nevan J. Krogan y Adolfo García-Sastre de la Universidad de California en San Francisco (Estados Unidos), y demás colaboradores, mostraron la actividad antiviral de este fármaco mediante la inhibición del factor eEF1A, en ensayos con ratones infectados con SARS-CoV-2. Sin embargo, estos resultados aún no se confirman en ensayos clínicos en pacientes, por lo que hay que esperar su aprobación para su uso en humanos. La verdad, es que este fármaco tendría un efecto solo en las fases iniciales de la infección, cuando el virus está en la etapa de replicación, más no así en las fases posteriores y más graves, bajo un proceso de inflamación generalizada.