Si la frase “limón del Himalaya” vagamente te suena conocida, quizá sea porqué la escuchaste en un comercial mexicano de un shampoo para cabello por allá de finales de los 90’s (si no me falla la memoria), en el cual la protagonista, la chica con el cabello largo y brillante, inventaba remedios exóticos como el “limón del Himalaya” para no revelar el nombre del shampoo que usaba para tener un cabello tan bonito.
Aclarado el origen de la primera frase del título veamos qué relación guarda con el origen de los cítricos -frutos como las mandarinas, naranjas, limones y toronjas-. Los cítricos se cultivan en muchas regiones del mundo, que varían en tamaño, forma, color y sabor. De hecho, hay una veintena de especies del género Citrus, pero se ha propuesto que solo tres de estas especies han dado origen a las diferentes variedades de frutos cítricos que consumimos cotidianamente. Por ejemplo, la naranja dulce es el resultado de la hibridación o cruza de Citrus maxima (el pomelo) con Citrus reticulata (la mandarina). Esta variación ha entorpecido la identificación de cuáles son especies verdaderas, variedades y cuáles son híbridos o cultivares. Esto ha dificultado el rastreo del origen de los cítricos.
Las variedades cultivadas (domesticadas) de cítricos son reproducidas mediante injertos y han sido esparcidos a lo largo del mundo por los humanos, mientras que las especies de cítricos que no se cultivan y que no son tan conocidas abundan en Asia y parte de Oceanía, en una vasta región que abarca desde el norte de China e India hasta el Norte de Australia incluyendo muchas de las islas entre Asia y Australia y las islas de la Polinesia occidental. El fósil más antiguo que se conoce de un fruto cítrico fue encontrado en la provincia China de Yunnan y cuenta con una antigüedad de 8 millones de años por lo que vivió en el Mioceno tardío, una época donde todavía no había humanos. Este fósil ha permitido especular que el centro de origen de los cítricos son las estribaciones al sureste de los montes Himalaya, una región al noreste de la India y al noroeste de China.
Un reciente estudio (febrero de 2018) publicado en la revista Nature y firmado por casi 20 científicos tanto de Japón, España, Francia y Estados Unidos, muestra un análisis genético de 60 tipos diferentes de cítricos provenientes de todo el mundo. De acuerdo con la similitud en las secuencias del ADN obtenidas para las diferentes especies y variedades de cítricos, se logró identificar que cinco especies de Citrus y no tres como se había postulado, han dado origen, a través de cruzas, a las diferentes variedades de frutos cítricos que consumimos. Además, este estudio esboza una hermosa e interesante historia sobre el origen y la formación de las actuales especies de Citrus y su expansión hacia varios países.
Una pista importante sobre el origen de los cítricos fue el descubrimiento del fósil de Yunnan en 2009-2011, bautizado como Citrus linczangensis, el cual reúne todas las características morfológicas del género Citrus por lo que en la época en que existió hubo un ancestro común de los cítricos actuales que se extendía en las estribaciones de los Himalaya, y al que llamaré “limón del Himalaya”. Los autores analizaron los cambios entre las secuencias de ADN de las diferentes especies de Citrus a lo largo del tiempo con referencia a la edad del fósil de Yunnan y lograron identificar dos épocas en que surgieron nuevas especies de cítricos. La primera de ellas fue durante el Mioceno tardío, una época en que la disminución de los monzones, comunes en esa región, permitió la migración del limón del Himalaya hacia regiones tan remotas como las islas de Guinea y de la Polinesia. De acuerdo a los autores del estudio, se trató de una diversificación rápida, un proceso que ocurrió en un par de millones de años. Hablando en tiempos evolutivos es poco, pero para el tiempo de los humanos fue toda una odisea que requirió millones de generaciones.
Para visualizar el proceso, hay que imaginar que lentamente, generación tras generación, el limón del Himalaya fue invadiendo nuevos territorios, mientras las condiciones climáticas y geográficas se lo permitieron. Su estirpe logró escalar montañas y valles, sortear ríos y lagos, quizá con la ayuda de los grandes mamíferos que pululaban en esa época. En esos ayeres hubo grandes migraciones debido a la sequía, y quizá los mamíferos que se alimentaban de los frutos de este primitivo limonero devolvían el favor depositando las semillas intactas entre sus heces muy lejos de donde comieron la fruta. Pero sin duda el reto más imponente que tuvo que sortear el limón del Himalaya fue cruzar los mares para alcanzar las islas del sur de China. Quizá lo hicieron los frutos flotando a través del mar o quizá las semillas fueron llevadas en las patas o el buche de algún ave peregrina.
La expansión (o colonización) del limón del Himalaya se detuvo donde las condiciones climáticas no fueron apropiadas y cuando obstáculos infranqueables se presentaron, como el océano atlántico. Más tarde, cuando el clima volvió a cambiar, en muchos lugares el limón del Himalaya murió, mientras que en otros se pudo adaptar y persistir, creando poblaciones regionales, recónditas, aisladas unas de las otras, unas en China, otras en la India, y otras en Guinea por ejemplo. Estas diferentes poblaciones siguieron caminos evolutivos diferentes y se convirtieron en especies diferentes de Citrus. En esta etapa a partir una o dos especies de Citrus se formaron siete. Por ejemplo, en la India se formaría la especie Citrus medica, el citrón; mientras que en el norte de China se formó la mandarina, Citrus reticulata; y en las islas de Filipinas la papeda, Citrus micranta.
En una segunda etapa de diversificación (formación de especies), durante el Plioceno, hace 4 millones de años, las condiciones climáticas fueron favorables para que algunas especies de Citrus de las islas cerca de Guinea cruzaran el mar hasta llegar el norte de Australia. En ese nuevo territorio, solo unos pocos pudieron adaptarse y formar con el tiempo las especies de limas australianas, raras y exóticas sin igual. En esta etapa a partir de una especie de Citrus se formaron tres nuevas. Hay, por ejemplo, una lima negra con forma de dedo que es considerada el caviar de los veganos.
Más tarde en la historia, las cruzas naturales entre las especies de cítricos, así como las cruzas orquestadas por la mano del hombre dieron origen a las diferentes variedades actuales de frutos cítricos. Ahora, cada vez que comas un gajo de mandarina y cada vez que pases un trago de jugo de naranja te dejará un resabio de la historia agridulce del limón del Himalaya.
Fuente: Guohong Albert Wu, Javier Terol, Victoria Ibanez, et al. 2018 Genomics of the origin and evolution of Citrus. Nature. Disponible en: https://www.nature.com/articles/nature25447
M.C. Claudio Meléndez González Lab. Ecología Química y Agroecologia Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad UNAM, campus Morelia.