El sexo en los peces

Escrito por Arely Ramírez García y Martina Medina Nava

¿Alguna vez has pensado cómo tienen sexo los peces?

Existe una gran variedad de peces, de distintas formas, colores y tamaños. En este sentido, su manera de reproducirse también es variada y en algunas especies es… ¡sorprendente! Para la mayor parte de los seres vivos, la reproducción es una actividad indispensable, ya que la finalidad es dejar descendencia (crías o hijos) en donde los genes de los padres pasen de una generación a otra. Para lograrlo, los peces, tanto marinos como dulceacuícolas, presentan distintas formas de reproducirse, es decir, de tener sexo… y precisamente eso lo resumimos en tres estrategias distintas: Ovíparos, Ovovivíparos y Vivíparos.

Ovíparos

La primera estrategia la presentan los peces ovíparos, que en su mayoría tienen un sistema de reproducción donde la fecundación (unión de gametos femenino y masculino) es externa, es decir, pasa la hembra y deposita sus huevos en algún lugar (piedras, plantas, arena, etc.) y después pasa el macho y deja su esperma. A esto se le conoce como fecundación externa, por lo que literalmente este tipo de peces no se tocan, no hay penetración o contacto, razón por la cual nos preguntamos: ¿Cómo es que se logran fecundar? ¿Habrá otras formas de comunicación a distancia, como cuando te guiñen un ojo o te lanzan un silbido? En algunas especies, hay estimulación o cortejo para que la hembra ponga sus huevos, algo así como pasearse y exhibir una danza exótica y unos movimientos sexys.

Peces como los pescados blancos, charales, tilapias, mojarras, sardinas, etc., presentan este tipo de reproducción. Estos peces que desovan (ovíparos), dejan a sus crías a la deriva, la mayoría de ellos los dejan a su suerte dentro del agua, sin un cuidado parental de huevos ni alevines, pero no todos los peces los dejan al azar del destino, algunos tienen tácticas para lograr proteger a sus bebés en las diversas formas donde los colocan. Por ejemplo, buscan materiales o lugares donde “esconder” o protegerlos, como plantas, rocas o sobre fondos de arena gruesos o finos.

Por otro lado, existen las “guarderías”, lugares adecuados que los peces eligen para poner las crías y donde serán cuidados por uno de los padres o por ambos, también suelen ser rocas y plantas, creando un tipo de nido dentro del lugar. En éstos, algunos peces presentan “pegamento” en los huevos, un tipo de adherente que sirve para que éstos estén fijos en los lugares seleccionados y puedan mantenerse ahí hasta que logren nacer los peces.

También hay peces protectores de sus bebés, que tienen cuidado parental, donde los padres protegen a sus crías mediante una “incubadora”. Un ejemplo es el de las tilapias que guardan sus huevos dentro de su boca (incubadora bucal), para que logren eclosionar, salir al medio acuático ya desarrollados como pececillos que pueda nadar y escapar de pequeños depredadores, y que además, pueda alimentarse por sí solo.

 

Ovovivíparos

La segunda estrategia la presentan los peces ovovivíparos, en los que el asunto del sexo se pone más interesante. Las hembras mantienen los huevos dentro del cuerpo (en el ovario), en los que una vez fecundados, se desarrollan los bebés, pero no son alimentados por su mamá, ya que cada pequeño huevo contiene una sustancia que sirve como el alimento (nutrientes, proteínas y minerales) necesario para que sobrevivan dentro de la madre hasta nacer. Esta sustancia es llamada vitelo.

Algunos tiburones —ya que éstos pueden presentar los tres tipos de estrategias—, y los pequeños peces de acuarios llamados Mollys o pez espada, tienen esta reproducción, y es fácil distinguir a simple vista si son machos o hembras, ya que presentan adaptaciones de las aletas como la anal, modificación externa muy notable, los radios y espinas se modifican a un órgano intromitente, similar al pene de los mamíferos.

Por ejemplo, en los peces conocidos como Mollys (familia Poecilidae), las hembras suelen ser más grandes que los machos y estos últimos tienen la aleta anal alargada a diferentes tamaños y ornamentaciones, y dependiendo de la especie, esta aleta llamada “gonopodio”, es la que utilizan para retener a la hembra, copular y así fecundarla. Generalmente, los machos tienden a ser más guapos o atractivos —cosa que no pasa en los humanos, ya que las mujeres son las más atractivas—, pues llegan a presentar coloraciones variadas en sus aletas (rojo pasión o naranja). Los tiburones también presentan diferencias sexuales externas, por ejemplo, los machos presenta modificaciones en las aletas pélvicas llamadas “gonopterigios” o “claspers” (en inglés), que les sirven para la transferencia del esperma a la hembra. Los tiburones hembras suelen ser felices, pues los tiburones machos tienen dos órganos de éstos.

 

Vivíparos

Por último, la tercera estrategia es la que presentan los peces vivíparos, en este caso, los machos también tienen la aleta anal modificada llamada “andropodio”, la cual permite el paso de los espermatozoides hacia el ducto urogenital de la hembra, pero sin haber penetración. Una vez que sucede el cortejo y el apareamiento, la hembra queda grávida (embarazada) y los pequeños bebés (embriones) se alimentan del vitelo que les ofrece el huevo en el que crecen. Sin embargo, lo interesante es que estos pequeños peces además de alimentarse del vitelo, también tienen un cordón umbilical llamada trofotenia —ésta es la principal diferencia con los ovovivíparos—, el cual tiene la misma función que el de los mamíferos, un invento de los peces que le ganó por millones de años a los mamíferos.

 

Aquí se encuentran los llamados tiros y chehuas, que pertenecen a la familia Goodeidae, son peces originarios y exclusivos de algunos cuerpos de agua del centro de México, pequeños peces de aproximadamente 60 a 200 milímetros de largo, quienes presentan esta estrategia, llegando a mantener a sus crías dentro de sus ovarios. El número de embriones por cada hembra varía de acuerdo a la especie; se han llegado a reportar un mínimo de ocho embriones, pero se ha reportado que la hembra del pez conocido como Tiro (Goodea atripinnis), con un tamaño de 149 mm, puede llegar a contener hasta 167 embriones a punto de nacer. Nos consta, que en la Laguna de Zacapu, un Tiro que atrapamos contenía ¡235 embriones dentro del ovario!

Estos tres tipos de estrategias reproductivas de los peces son lo que los ha llevado a tener ese gran éxito, permitiéndoles mantenerse vivos desde el periodo Devónico (hace 416 millones de años).

Hay diferencias en el sexo entre los diferentes peces; no obstante, todas las estrategias están enfocadas hacia al mismo camino: dejar una mayor descendencia de crías, unos queriendo dejar muchos huevos, pero cuidándolos poco, por lo que apuestan a muchos huevos y baja supervivencia, quedando una pequeña porción de esos miles de huevos. Otros optan teniendo menos, pero cuidándolos dentro de ellos para que todos sobrevivan y salgan listos para luchar contra los peligros de la vida. Y otros, cuidándolos dentro de ellos y teniendo pocos hijos para poder proporcionar el doble de alimento para que nazcan más fuertes y grandes.

Las tres estrategias —de tener sexo— presentan ventajas y desventajas; sin embargo, la gran diversidad de peces, les ha permitido buscar la manera que más le convenga para que su especie no llegue a desaparecer.

 

  

Domínguez-Domínguez, O. y Pérez Ponce de León, G. (2007). Los Goodeidos, peces endémicos del Centro de México. CONABIO. Biodiversitas, 75:12-15.

https://www.biodiversidad.gob.mx/Biodiversitas/Articulos/biodiv75art3.pdf

Espinoza-Pérez, H. (2014). Biodiversidad de peces en México. Revista Mexicana de Biodiversidad, Supl. 85: S450-S459. http://www.ib.unam.mx/m/revista/pdfs/53.-_1203.pdf

Biodiversidad Mexicana. Comisión Nacional para el Conocimiento y uso de la Biodiversidad. https://www.biodiversidad.gob.mx/especies/gran_familia/animales/peces/peces.html

 

Arely Ramírez García, estudiante del Programa Institucional de Doctorado en Ciencias Biológicas de la Facultad de Biología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

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Martina Medina-Nava, profesora investigadora del laboratorio de Biología Acuática de la Facultad de Biología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

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