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U.M.S.N.H. Año 12 /Enero - Febrero/ No. 67



            Cuando los niveles de leptina se alteran
                  Si analizamos detenidamente la función na-
            tural de la leptina, lo más lógico es pensar que si te-
            nemos más grasa en nuestro cuerpo, entonces va a
            secretar más leptina y le mandará la señal de sacie-
            dad a nuestro cerebro, haciendo que comamos me-

            nos y no aumentaremos de peso, pero la realidad
            es algo  más compleja. En  estudios realizados en
            personas con obesidad, se hizo evidente que varias
            de ellas tienen niveles altos de leptina circulante…
            Entonces, ¿qué pasa? Su cerebro debería haber re-
            cibido la señal de saciedad, ¿no?
                  La cuestión es que, si la obesidad está pre-
            sente, se producen  constantemente  niveles  más
            altos de leptina debido a un consistente alto nivel

            de insulina, por lo que el cuerpo se vuelve progre-
            sivamente insensible a la hormona y se produce la
            denominada resistencia a la leptina. Esta es una
            condición que padecen algunas personas sin saber-
            lo, y  es cuando  el cuerpo  produce  leptina,  pero
            tiene insensibilidad a sus efectos; es decir, el cere-
            bro no recibe la alerta de saciedad y, por lo tanto, es

            más probable que se aumente de peso por comer                                     Crédito: Alejandra Pérez Nava
            de más.
                  La resistencia a la leptina también se desa-
            rrolla con la edad, lo que incrementa el potencial     des en el número y función de los linfocitos T, los
            de aumento de peso más adelante en la vida. Se-        cuales son parte del sistema inmunitario y se for-
            guramente has escuchado de varias personas que         man a partir de células madre en la médula ósea y
            conforme han avanzado en edad, dicen que les es        que ayudan a combatir infecciones y el cáncer.
            más difícil mantenerse en el peso que regularmen-            La ausencia de leptina hace que nuestro or-
            te manejaban, o que les cuesta más trabajo bajar       ganismo crea que no tiene nada de grasa, lo cual

            de peso. Para el tratamiento de este problema, se      se traduce en una ingesta de alimentos descontro-
            ha investigado la indicación de una dosis diaria de    lada y una obesidad infantil severa. Además, la de-
            leptina; sin embargo, para los pacientes que mues-     ficiencia de leptina puede provocar un retraso en
            tran resistencia a ella, esto no ha resultado efectivo   la pubertad y un mal funcionamiento del sistema
            para inducir la pérdida de peso. Lo que sí parece ser   inmunitario. En estos casos, se les ha indicado a los
            efectivo, es llevar al cuerpo a un peso saludable, ya   pacientes una inyección diaria de leptina, lo que les
            que esto regula la función normal de la leptina, sen-  hace perder peso y también tiene un efecto mayor

            sibilizándose nuevamente el organismo y con ello       en la reducción de la ingesta de alimentos y en la
            respondiendo correctamente a su señal.                 inmunidad. Además, en mujeres de entre 35 y 40
                                                                   años que padecen este problema, este tratamiento
                                                                   les ha permitido regular sus periodos menstruales y
            Deficiencia de leptina
                  Se ha descrito también que algunas personas      su ovulación.
            pueden  tener  una  deficiencia  de  leptina,  la cual
            es causada por una mutación que da lugar a una         Investigaciones recientes sobre la leptina
            proteína truncada e inactiva. Las personas con esta          Como ya lo habíamos mencionado, la leptina
            mutación presentaron obesidad antes de los cinco       está presente en la leche materna, y una investiga-

            años;  estos  niños  también muestran anormalida-      ción muy interesante al respecto que hicieron en la
                                                                   Escuela Pública de la Universidad de Minnesota, ha




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