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U.M.S.N.H. Año 12/Noviembre-Diciembre/ No. 72



                  Los microorganismos, en particular las bac-            Pensemos que nuestro cuerpo se esteriliza,
            terias, están bastante desacreditados entre la po-     que de alguna manera eliminamos los millones de
            blación y, en parte, esta percepción negativa tiene    bacterias que nos habitan. De entrada, no vamos a

            su origen en la manera en que estudiamos la biolo-     digerir bien la comida, enseguida comenzaremos
            gía en la escuela (primaria y secundaria, principal-   a sufrir problemas inmunológicos, infecciones de
            mente), especialmente la microbiología. Siempre        la piel por hongos y otras bacterias patógenas, y
            se les asocia con enfermedades, y conocemos, si        de inmediato seremos colonizados por seres inde-

            acaso, a las bacterias por su relación con los males   seables, como amibas y otros organismos; nues-
            que  provocan.  No  obstante,  la  inmensa  mayoría    tro aroma cambiará y con ello la etiqueta que nos
            de las bacterias desempeñan funciones positivas        identifica con otras personas y con nuestras mas-
            e indispensables para nosotros y para la propia na-    cotas.

            turaleza. Esto se extiende a los hongos, los virus y,        Sin bacterias no tendríamos quesos, yogures
            por supuesto, al extenso número de insectos, áca-      y montones de productos para la alimentación, la
            ros, moluscos, artrópodos y gusanos de diversos        industria,  los  medicamentos  y  la  descontamina-
            tipos que pueblan el mundo.                            ción y regeneración del ambiente.

                  Así  es,  las  bacterias  juegan  papeles  funda-      De todo esto habla el libro que ahora reco-
            mentales  en  la  naturaleza,  al  grado  que  un  sue-  mendamos: Bacterias, bichos y otros amigos (Ariel,
            lo  estéril,  por  ejemplo,  difícilmente  sostendrá  la   2016) de David G. Jara, un bioquímico, investiga-
            vida. Varias especies de bacterias convierten mu-      dor y docente que compagina su actividad científi-

            chos minerales y nutrientes en asimilables para las    ca con la de divulgador de la ciencia.
            plantas. Sin bacterias, ineludiblemente, las plan-           Este  es  un  libro  entretenido  y  divertido,  y
            tas mueren.                                            creo que bien debería ser leído por docentes de


























































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