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Año 11 /Noviembre - Diciembre/ No. 66  U.M.S.N.H.



                  Aunque se le conoce comúnmente como la           importante cantidad de especies. Además de ser
            Sierra de los Cardos, son varios sus nombres se-       un paisaje sagrado para los habitantes de los al-
            gún  la  localidad  aledaña,  entre  algunos  de  ellos   rededores  por  tiempos  inmemorables,  Xurahue

            se encuentran la Sierra de Susticacán en el muni-      Muyeca sorprende e inspira por su encantadora y
            cipio de Susticacán y la Sierra de las Cándelas en     multicolor diversidad de plantas, animales y sobre
            el norte de Jerez. Aquí nos referimos a ella por su    todo de paisajes. Profundas y oscuras cañadas, pa-
            nombre wixarika, Xurahue Muyeca, que aunque se         redones  de  rocas  colosales,  inmensos  monolitos

            puede encontrar escrito de distintas formas, todos     en formas fantasiosas y amplios campos cubiertos
            los autores coinciden en que significa ‘Cerro de la    de flores, son solo algunos de los panoramas que
            Estrella’. Su extensión es confusa, ya que no existe   conforman esta enigmática sierra.
            una delimitación oficial, pero mapas estatales la

            distinguen como una sola sierra, mientras que el       Mosaico de diversidad
            INEGI la separa como un área continua de sierra              Un  estudio  reciente  encontró  que,  en  solo
            alta  de  aproximadamente  800  km2,  rodeada  de      una parte de la sierra, se puede distinguir un in-
            valles y lomeríos.                                     trincado  mosaico  de  tipos  de  vegetación,  cada

                  Aunque muy valiosos, los estudios en la zona     una con especies características y vinculadas a un
            apenas hurgan la superficie de su diversidad bio-      hábitat específico. Así, podemos encontrar exten-
            lógica. Los únicos dos estudios de flora, han en-      siones de arbustos y nopales en las laderas más
            contrado  una  riqueza de plantas  considerable,       secas, bosques frescos de encinos con las plan-

            algunas de ellas en peligro crítico de extinción,      tas más exuberantes en cañadas, ensamblajes de
            por lo que concluyen con la necesidad de una ma-       plantas adaptadas a las condiciones extremas de
            yor  exploración  en  el  área. Asimismo,  los  pocos   los peñascos, por mencionar algunas de las vege-
            estudios enfocados en fauna revelan también una        taciones más contrastantes. A lo largo de estas co-

















































                      Parte de la sierra entre los municipios de Susticacán y Jerez. Realmente es un mosaico de comunidades vegetales, donde es
                              posible apreciar pinares, encinares, chaparrales y vegetación de peñascos. Fotografía: Leopoldo Hurtado Reveles.



        Coordinación de la Investigación Científica                                                                    27
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