Page 95 - no_69
P. 95
Año 12 /Mayo-Junio/ No. 69 U.M.S.N.H.
Del crimen, ha sobrevivido la madre, Francis- sificatorio para estas huellas dactilares, hasta llegar
ca Rojas, una mujer muy conflictiva que solo resultó a los controvertidos trabajos de César Lombroso,
mal herida, pero que alcanzó a salvarse, para luego quien identificaba estas características antropomé-
declarar que efectivamente fue el compadre el au- tricas con la capacidad intelectual, tendencias crimi-
tor del crimen. Vucetich y Diamant, empleando la nales, entre otras cosas totalmente ajenas. También
observación detallada y la disposición de la escena abunda en la muy convulsa realidad política de Ar-
del crimen, sospechan que es más complejo que la gentina y en el fenómeno de la inmigración europea,
idea simplista del jefe local, por lo que organizan buscando nuevas oportunidades de desarrollo, has-
todo para preservar la escena y tomar las huellas ta el ya comentado movimiento anarquista. Todo
digitales encontradas por todos lados. esto crea un contexto que nos permite entender la
El asunto se complica con la dura resistencia dimensión del aporte de Juan Vucetich.
de las autoridades locales y un actor inesperado: los Como buen novelista, hace uso de varias licen-
grupos anarquistas, muy activos en el país con la cias que le dan una gran agilidad e interés a la his-
llegada de inmigrantes europeos y quienes se opo- toria que cuenta, permitiendo que nos metamos en
nen activamente a la posibilidad de que un método ella cual thriller adictivo y que nos identifiquemos
antropométrico pueda ser usado para identificar a con las dudas y las pasiones de ese par de científicos
cada persona, por considerar que compromete ine- en el mundo más anticientífico.
vitablemente la libertad ante un poder totalitario, Un libro muy interesante, basado en hechos
además de suponer que el método los tratará de reales que plantea el descubrimiento de un método
marcar «como ganado». Todo ello complica el tra- ahora rutinario, pero que en su momento fue sabo-
bajo de Vucetich, quien se encuentra con vertientes teado, combatido y negado por intereses totalmen-
económicas, ideológicas y políticas que mezclan y te ex- traños a los que pretendía,
enturbian todo, cuando él solo desea justicia para ¡no se lo pierdan!
los niños y el arresto inequívoco del culpable.
Andahazi, como nos tiene acostumbrados
en sus novelas anteriores, crea un marco his-
tórico muy preciso, con antecedentes que
van desde los intentos de Francis Galton
en el siglo XIX por crear métodos pre-
cisos de identificación individual y
quien descubrió las características
individuales de las huellas dactila-
res, pasando por Edward Henry
quien a finales del siglo XIX, en la
India, desarrolló un sistema cla-
Coordinación de la Investigación Científica 95