Insectos benéficos, aliados del agricultor

Escrito por Sinue I. Morales Alonso y Samuel Pineda Guillermo

La escasez de alimentos ha llegado a afectar a más de 20 millones de personas en todo el mundo. El crecimiento de la población a nivel mundial puede verse afectado por la disponibilidad de alimentos y, debido a ello, vale la pena preguntarnos si en un futuro no muy lejano habrá alimento para todos. Asegurar el abastecimiento de los alimentos, como un derecho de los seres humanos, ha sido un reto constante tanto de investigadores como de las autoridades gubernamentales. 

Foto: Sinue I. Morales Alonso

Consecuencias de la Revolución Verde en la Producción de Alimentos

América Latina es un claro ejemplo del desproporcionado incremento entre la población y la baja producción de alimentos. Ante este reto, en los años 40´s del siglo pasado, el Ing. Norman Borlaug en colaboración con la Fundación Rockefeller y apoyo de la Oficina de Estudios Especiales en México, actualmente Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), implementó en México el movimiento tecnológico denominado Revolución Verde.

Este término fue acuñado por el director de la Agencia para el Desarrollo Internacional de los Estados Unidos, William S. Gaud, refiriéndose al “éxito por la obtención de variedades de alto rendimiento de cultivos como el trigo, maíz y arroz, mediante el uso de técnicas agrarias de alta productividad en diferentes países”. Este movimiento trajo cambios extraordinarios en el sector agrícola y reflejó un incremento en la productividad y, por lo tanto, de alimentos, para satisfacer las necesidades de la población.

A pesar de los esfuerzos de la Revolución Verde, la producción de alimentos sigue siendo un tema pendiente debido a los problemas fitosanitarios a los que se enfrentan los cultivos, entre ellos, los insectos plaga. Aunque con la Revolución Verde se incrementó la producción de cereales, este programa trajo como consecuencia un aumento en el uso de insumos agrícolas tales como insecticidas, herbicidas y fertilizantes.

Otra de las consecuencias de la Revolución Verde fue el establecimiento de grandes extensiones de monocultivos con el objetivo de aumentar la producción para el abastecimiento de alimentos, lo cual inevitablemente conllevó a un aumento de problemas de índole fitosanitario, provocando pérdidas económicas, contaminación de suelos y alimentos, agua o bien la disminución en el rendimiento del cultivo.

El uso de insecticidas de síntesis química ha sido la forma más recurrente para combatir a los insectos que afectan la producción, pero su uso indiscriminado ha causado diversos problemas tales como la contaminación del ambiente, intoxicación al ser humano, generación de plagas resistentes, así como la disminución de las poblaciones de los insectos benéficos, entre otros.

 

¿Existen los insectos benéficos?

¡Por supuesto que existen! y son fundamentales en los sistemas agrícolas. Los insectos benéficos son depredadores o parasitoides que, de forma natural o artificial (a través de liberaciones inundativas), se han usado exitosamente para controlar a otros insectos que son plagas de diversos cultivos. Debido a la gran problemática que se presenta día a día para el control de plagas, el uso de los insectos benéficos nos brinda una alternativa selectiva, segura y compatible con el medio ambiente y el hombre.

Como ya lo mencionamos, los insectos benéficos pueden ser depredadores; es decir, organismos que se alimentan en sus etapas de vida joven y adulto de diversas presas, y parasitoides (avispitas, la mayoría de un tamaño milimétrico); las larvas de estos se alimentan de un hospedero (otro insecto), mientras que los adultos son de vida libre y se alimentan del néctar de las flores.

Los insectos benéficos otorgan un servicio ecológico en los sistemas conservados y perturbados (áreas forestales y agrícolas), son los enemigos naturales de los herbívoros y son muy importantes en el sector agrícola debido a que regulan las poblaciones de los insectos perjudiciales, los cuales causan pérdida parcial o total de la producción de los cultivos.

 

Nuestros aliados: insectos depredadores y parasitoides

En México se utilizan los entomopatógenos (organismos que causan enfermedades a los insectos) y los insectos benéficos como agentes de control biológico. Un dato interesante es su implementación en campañas nacionales para controlar distintas plagas de importancia económica. Esto consiste en realizar liberaciones en los cultivos plagados y el resto del trabajo va por su cuenta de estos enemigos naturales. Pero, ¿qué características tendrán estos enemigos naturales que los hacen tan prometedores para el control de plagas?...

Todo insecto que se considere como un candidato potencial para ser implementado en el control biológico de plagas, ya sea depredador o parasitoide, debe cumplir con ciertas características. Si hablamos de los insectos depredadores, tanto su etapa de vida joven, como adulta, deben ser polífagos (que se alimentan de una amplia variedad de especies, pertenecientes a distintas familias taxonómicas), tanto machos como hembras son de mayor tamaño que su presa, presentan una alta capacidad de búsqueda, ágil manipulación y que consuman gran número de su presa.

Por otro lado, los parasitoides, los cuales son distintos a los parásitos, en las primeras fases de vida (huevo y larva) viven dentro o fuera del cuerpo de otro insecto y el adulto es de vida libre. Éstos pueden ser parasitoides específicos y generalistas (con su hospedero), logrando sincronizar su crecimiento con el insecto plaga.

Existen parasitoides especialistas y no-especialistas para la búsqueda de su hospedero, ya que su hospedero se puede encontrar en el follaje de alguna planta o árbol a la vista del parasitoide (no-especialistas) y en otros casos puede estar dentro de tallos, frutos o en granos almacenados; entre otros (especialistas). Las hembras de los parasitoides pueden paralizar o matar a su hospedero al momento de colocar su huevo sobre o dentro de él.

También hay que considerar que existen parasitoides que emergen con un número limitado de huevos y otros que van produciéndolos a través de su vida. Todo lo anteriormente mencionado acerca de nuestros aliados son características muy importantes que deben cumplir para poder ser utilizados en el control de plagas. Además, algunos parasitoides tienen alianza con otras entidades (virus) y organismos (bacterias) que les permiten tener éxito en su desarrollo y reproducción.

Las prácticas de liberación de los insectos benéficos deben implementarse en los tiempos correctos, cuando las poblaciones del insecto plaga no son muy altas, ya que estos son una alternativa de prevención que pueden mantener niveles de daño bajos y evitar el uso de insecticidas químicos de manera frecuente. No lo olvides, estos organismos, tanto los depredadores como los parasitoides nos están proporcionando un servicio al regular los niveles de las poblaciones de insectos plaga en los cultivos.

Tan importante ha sido el uso de estos enemigos naturales que se remonta desde el año 300 D. C. en las comunidades chinas que implementaron el uso de colonias de hormigas para controlar plagas que se encontraban en el follaje en los árboles de limón, toronja y naranjo. Pero hablemos de casos más recientes. A inicios de 1990 en América Latina, los cultivos de café se vieron afectados fuertemente por una plaga conocida como la broca del café; un pequeño escarabajo que fue controlado con las liberaciones masivas de una pequeña avispa parasitoide llamada Cephalonomia stephanoderis Betrem, logrando un parasitismo sobre esta plaga de hasta un 68%.

En México, en 2011 se implementó el uso de otra avispa parasitoide llamada Tamarixia radiata Waterson para el control del psílido asiático, una plaga invasora que se alimenta de la savia de los árboles de limón, naranja y toronja, pero que también transmite una bacteria que causa una enfermedad devastadora en estos cítricos. Sólo para darnos una idea, esta avispa ha causado hasta un 70% de parasitismo sobre esta plaga. Así como estos ejemplos exitosos de insectos depredadores y parasitoides; nuestros aliados, a nivel mundial hay muchos más.... 

Es importante resaltar que estas alternativas no son la solución a los problemas fitosanitarios que nos aquejan, pero sí contribuyen de manera muy importante en la disminución del uso de insecticidas químicos para el control de plagas y subsecuentemente un menor impacto en los ecosistemas y la salud humana. 

Así que, ahora ya sabes que no estamos solos y tenemos a estos maravillosos aliados como una alternativa para ayudar en temas tan importantes como es la seguridad alimenticia.

En el Instituto de Investigaciones Agropecuarias y Forestales de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, se realizan diversas investigaciones relacionadas con el control biológico encaminadas a contribuir al país con alternativas viables que se pueden incorporar al momento de estructurar los programas de control integrado de plagas. En este instituto también se forman profesionales con alta capacidad para laborar en diversos sistemas agrícolas donde se pueda implementar esta herramienta de control que cada día crece en el sector agrícola como una necesidad por producir alimentos libres de pesticidas. 

  

Rodríguez Del Bosque, L.A. y Arredondo Bernal H.C. (Eds.). (2007). Teoría y Aplicación del Control Biológico. Sociedad Mexicana de Control Biológico, México. 303 p. Disponible en www.smcb-mx.org/. 

Nicholls, E.C.I. (Ed.). (2008). Control biológico de insectos: un enfoque agroecológico. Ciencia y Tecnología, Colombia. 282 p.  http://globalalternatives.org/node/125.

(SME) Sociedad Mexicana de Entomología (http://www.socmexent.org/).

Sinue I. Morales Alonso  es estudiante del Programa Institucional de Doctorado en Ciencias Biológicas opción Ciencias Agropecuarias, Ambientales y Forestales.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. 

Dr. Samuel Pineda Guillermo es Profesor e Investigador, ambos del Laboratorio de Entomología Agrícola del Instituto de Investigaciones Agropecuarias y Forestales de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.